Corresponsabilidad

¡Buenos días a todas y todos!

Este mes de Noviembre hemos continuado impartiendo nuestras sesiones de Escuela de Padres. En la última sesión de la semana pasada, nuestro tema central era la participación de los hijos en la vida familiar.

Hablamos de lo que es el trabajo familiar y la correponsabilidad… ¿Qué tal aplicáis la distribución de tareas en casa? ¿Hacéis un reparto justo o hay sobrecarga de roles? De todo estuvimos hablando con los padres asistentes, en un debate muy enriquecedor.

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¿Sabéis en qué consiste la corresponsabilidad? No es otra cosa que el necesario reparto de las tareas domésticas y de las responsabilidades familiares entre los miembros de un hogar (no sólo padre y madre, sino también los hijos!). Se trata de hacer una distribución equilibrada, justa, dentro de las tareas domésticas, lo que implica desde la organización, hasta el cuidado, la educación y el afecto hacia las personas dependientes,  para de esta manera distribuir justamente los tiempos de vida de hombres y mujeres.

Para que haya una adecuada corresponsabilidad familiar, el reparto de tareas, tiene que ser percibido como justo por los distintos miembros de la familia. Que sea un reparto justo, no significa que sea igual, es decir, si los dos miembros de la pareja trabajan fuera de casa, al llegar del trabajo, tendrán que repartirse las tareas domésticas, en función de habilidades y capacidades y gustos; hay que evitar sobrecargar a las mujeres en este rol.

Además, la corresponsabilidad familiar, tiene muchos beneficios también para nuestros hijos, si les hacemos un adecuado reparto de tareas en función de su edad y sus capacidades; les educamos en valores como la responsabilidad, la valoración del trabajo de otros y la cooperación, así como fomentamos su autoestima, al ellos sentir que a pesar de que realizar las tareas supone un esfuerzo,  contribuir al trabajo familiar es gratificante. También estaremos fomentando su independencia, al no darles todo hecho, y que de esta manera sean más autónomos; y por último, les estamos educando para incorporarse a una sociedad en la que hay que trabajar, y con una distribución de roles igualitaria.

La clave de esto, está en motivar adecuadamente a los hijos. Centrarnos en lo positivo, en el esfuerzo y no tanto en el resultado, tener paciencia y ser nosotros mismos un ejemplo son algunas de las pautas que dimos a nuestros padres asistentes. Además, es importante no establecer comparaciones entre hermanos y reconocer entre la familia el buenhacer. Para ello, será importante, establecer unas expectativas realistas y ser muy claros y concisos sobre en qué consiste la tarea que les vamos a asignar y cómo queremos que la hagan. De nuevo, la clave: la paciencia. Pero no evitemos que hagan tareas del hogar porque tarden más que nosotros en hacerlas o porque creamos que no las van a hacer tan bien como nosotros. Pensad que estamos fomentando su autonomía y que poco a poco y con nuestro apoyo por su esfuerzo irán haciendo las cosas mejor.

¡Feliz semana y buena corresponsabilidad ;)!

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